jueves, 17 de mayo de 2012

I SI? / ¿Y SI? (6)


29N0005

I SI TENIM EL QUE ENS MEREIXEM?

Els dies 16, 17 i 22 de maig els docents de la Comunitat Valenciana hem sigut convocats a un atur en defensa de l'ensenyament públic. El seguiment de les dues primeres jornades ha sigut decebedor. I és que, en els centres públics es viu una calma chicha, alimentada pel llegendari menfotisme valencià, que no té res a veure amb la “marea verda” que va creixer a la Comunitat de Madrid després d'una desena de dies de vaga. Els compromesos professors madrilenys van resistir els menyspreus d'Esperanza Aguirre fins a convertir-se en el motor que va contagiar a pares i alumnes. Ací el desplegament de justificacions per a no fer vaga va des del clàssic “no m'ho puc permetre econòmicament”, al conformista “no serveix per res”. Pot ser que els sindicats hagen calculat malament la seua capacitat de mobilització, fins i tot que hi haja professors que preferisquen que es dediquen els fons públics al sistema bancari que a l'educació. Amb tot, aquesta escassa mobilització és incomprensible davant l'atac que està patint l'ensenyament públic. Com a exemple, en el meu centre públic, anem a passar de 92 professors en 2010 a 60 en 2012. Aquesta reducció és una tònica generalitzada en tots els centres, en els dos últims cursos 2422 professors han perdut el seu treball i en el pròxim poden sobrar 6000. Van a passar a ser habituals les classes amb 40 alumnes. Els programes educatius per a ajudar als alumnes amb dificultats han sigut eliminats. En resum, en dos cursos anem a retrocedir 25 anys i tot açò en la comunitat autònoma amb més fracàs escolar.
Què hi ha dels pares i els alumnes? El desmantellament de l'educació pública, no va amb ells? No entenen que quan els responsables polítics diuen “les mesures que estem prenent van encaminades a garantir l'educació pública de qualitat” volen dir exactament el contrari?
Els professors necessitem que la societat defense també l'educació pública però no podem esperar que, si nosaltres no lluitem per dignificar el nostre treball, ho facen uns altres.
La meua generació, gràcies a l'esforç i la lluita dels nostres pares i avis ha tingut accés al millor sistema educatiu públic de la història, que ara, amb la coartada de la crisi, s'està desmantellant per a què ni els nostres fills, ni els nostres néts puguen gaudir d'ell. Si no lluitem per salvar el que queda d'ell, no anem a poder mirar a la cara, sense avergonyir-nos, ni als nostres avis, ni als nostres pares, ni als nostres fills, ni als nostres néts.
Potser el dia 22 puguem revertir aquesta situació amb una mobilització massiva per a demostrar que no, que no ens mereixem el que estan fent amb l'educació pública. El problema és que, eixe dia, la convocatòria de vaga és nacional i segurament encara que la calma chicha valenciana es convertisca en marejol, quedarà diluïda en la marea verda.

¿Y SI TENEMOS LO QUE NOS MERECEMOS?

Los días 16, 17 y 22 de mayo los docentes de la Comunidad Valenciana hemos sido convocados a un paro en defensa de la enseñanza pública. El seguimiento de las dos primeras jornadas ha sido decepcionante. Y es que, en los centros públicos se vive una calma chicha, alimentada por el legendario menfotisme* valenciano, que nada tiene que ver con la marea verde que fue creciendo en la Comunidad de Madrid tras una decena de días de huelga. Los comprometidos profesores madrileños resistieron los desprecios de Esperanza Aguirre hasta convertirse en el motor que contagió a padres y alumnos. Aquí el despliegue de justificaciones para no hacer huelga va desde el clásico “no me lo puedo permitir económicamente”, al conformista “no sirve para nada”. Puede que los sindicatos hayan calculado mal su capacidad de movilización, puede incluso que haya profesores que prefieran que se dediquen los fondos públicos al sistema bancario que a la educación. Con todo, esta escasa movilización es incomprensible ante el ataque que está sufriendo la enseñanza pública. Como ejemplo, en el centro público en el que trabajo, vamos a pasar de 92 profesores en 2010 a 60 en 2012. Esta reducción es una tónica generalizada en todos los centros, en los dos últimos cursos 2422 profesores han perdido su trabajo y en el próximo pueden sobrar 6000. Van a pasar a ser habituales las clases con 40 alumnos. Los programas educativos para ayudar a los alumnos con dificultades han sido eliminados. En resumen, en dos cursos vamos a retroceder 25 años y todo esto en la comunidad autónoma con más fracaso escolar.
¿Qué hay de los padres y los alumnos? ¿El desmantelamiento de la educación pública, no va con ellos? ¿No entienden que cuando los responsables políticos dicen “las medidas que estamos tomando van encaminadas a garantizar la educación pública de calidad” quieren decir exactamente lo contrario?
Los profesores necesitamos que la sociedad defienda también la educación pública pero no podemos esperar que, si nosotros no luchamos por dignificar nuestro trabajo, lo hagan otros.
Mi generación, gracias al esfuerzo y la lucha de nuestros padres y abuelos ha tenido acceso al mejor sistema educativo público de la historia, que ahora, con la coartada de la crisis, se está desmantelando para que ni nuestros hijos, ni nuestros nietos puedan disfrutar de él. Si no luchamos por salvar lo que queda de él, no vamos a poder mirar a la cara, sin avergonzarnos, ni a nuestros abuelos, ni a nuestros padres, ni a nuestros hijos, ni a nuestros nietos.
Quizá el día 22 podamos revertir esta situación con una movilización masiva para demostrar que no, que no nos merecemos lo que están haciendo con la educación pública. El problema es que, ese día, la convocatoria de huelga es nacional y seguramente aunque la calma chicha valenciana se convierta en marejada, quedará diluida en la marea verde.

* "acrónimo" de "me'n fot" que viene a querer decir "me la suda"

12 comentarios:

Rosa dijo...

Tenemos que dejar de esconder la cabeza y dejar de pensar que a mi no me pasará. Si, ya está pasando y tarde o temprano nos tocará...Unidos podemos luchar, no dejemos que otros luchen por nosotros.

Besos desde el aire

Miguel Torija dijo...

Estoy contigo Rosa, principalmente porque no creo que otros luchen por nosotros.

Rufo dijo...

Com diu Vicenç Navarro al seu article d'avui a Públic, el canvi no vindrà de ma d'Hollande, si no que serà asumit per ell a causa de la massiva mobilització ciutadana. El que ha passat a Grècia pasarà ací, pel 15M, per les vagues, per les manifestacions, per les eleccions fins i tot. Llàstima que no sigue també pels mestres valencians, encara que estic segur de que la resposta del dia 22 serà masiva, fins i tot al Pais Valencià.

Laura dijo...

Miguel ...resalto esta frase o párrafo porque me parece CERTERO :

<>

El retroceso es imparable y aunque sólo fuera en reconocimiento de los derechos, y de las causas que impulsaron a nuestros antecesores a "luchar", tampoco entiendo que docentes, padres y alumnos se queden parados.

Nuestros hijos serán los paganos de nuestras ausencias y luego lamentaremos lo que no hicimos.

BUENA ENTRADA, pena que sólo tres hayan comentado....¡vendrán más! ¡no desesperes!.

un beso desde mis palabras que también son las vuestras.

Miguel Torija dijo...

Gràcies Rufo pel teu comentari. La veritat es que no tinc tanta esperança com tu en l'esperit de lluita de la gent. A Espanya som en general prou patètics: Votem masivamente a Rajoy i ara mirem a França amb l'esperança de que Hollande ens allibere de les urpes neolliberals. Ja veurem que passa el dimarts.

Miguel Torija dijo...

Gracias por tu comentario Laura y por resaltar ese párrafo. El miedo es libre y también ofrece comodidad. Resistirse cansa, es más fácil dejarse llevar, escuchar a los que dicen: "tranquilos, dejadnos hacer, sabemos lo que os conviene, tranquilos..." y así está la gente tranquila... de momento.

Miguelángel Flores dijo...

Qué vergüenza. Qué más les da a ELLOS la educación, si ellos los llevan a escuelas privadas. De esta manera lo tienen todo calculado, el pais estará siempre en manos de los mismos: los hijos de los hijos de los privilegiados que siempre fueron a escuelas privadas... Qué vergüenza de pais. Ya digo, no mi padre, mi abuelo, si levantara la cabeza, pensaría que habían pasado diez minutos.
Un abrazo, Miquel.

Ro dijo...

MIentras tanto se aumenta la ayuda económica a los mal llamados centros concertados porque de concierto poco. No cumplen con los mínimos exigidos y cobran y cobran de la administración. Desfachatez y cinismo. Dentro de poco ya no sabremos ponerles adjetivos. Eso es lo que quieren.

Miguel Torija dijo...

Gracias por tu comentario Miguelángel.
Sí, hemos retrocedido muchas décadas en pocos meses. Tampoco los centros privados van a mejorar la calidad de su educación, ya que hasta ahora tenían que esforzarse para llegar al nivel que tenían los centros públicos. Ahora cuando se acaben de cargar la educación pública, se podrán permitir incluso bajar el nivel para ser mejores y atraer clientela.
Así que pronto, los españoles vamos a ser los peor formados de Europa estudiemos donde estudiemos.

Miguel Torija dijo...

Gracias por tu comentario Ro. El sistema de concertar la educación ha sido un atajo para subvencionar los centros privados y generar centros clasistas que no colaboran lo más mínimo en la integración social. Se acaban los adjetivos, tienes razón.

Rosana dijo...

Aquí en Madrid ayer muy bien!!!

Y espero haya más.

No tengo palabras para tanta mierda...


Abrazo

Miguel Torija Martí dijo...

Gracias Rosana por tu comentario. Por aquí también tuvo más seguimiento el martes, aun así, mucho menos del que debería haber tenido. Como dices habrá que seguir luchando para concienciar a la gente y que poco a poco la movilización aumente. Aunque lo de la semana pasada da ganas de enviarlo todo y a todos a la mierda. Después de estar todo el curso escuchando a la gente quejarse (que si patatín, que si patatán), ves que de 70 profesores solo 7 hacemos huelga... Es verdad que aquí los sindicatos tenían que haber actuado a principio de curso cuando la gente estaba más movilizada.